La prevención del cáncer es un conjunto de acciones destinadas a reducir la posibilidad de enfermar de cáncer. Al prevenir el cáncer, el número de casos nuevos disminuye en un grupo o población. Se espera que esto reduzca el número de muertes que causa el cáncer.
Para evitar que se formen cánceres nuevos, se analizan los factores de riesgo y los factores de protección. Cualquier cosa que aumenta la probabilidad de tener una enfermedad se llama factor de riesgo; cualquier cosa que disminuya la probabilidad de enfermar de cáncer se llama factor de protección.
Algunos factores de riesgo pueden evitarse (por ejemplo, fumar), mientras que otros no (factores hereditarios). En cualquier caso, ninguna de estas situaciones va a asegurar que uno evite enfermarse o no.
Se denominan enfermedades multifactoriales.
Cáncer de cuello de útero
El cuello del útero es el extremo inferior del útero, que se encuentra en el tercio superior de la vagina. Está formado por distintos tipos de células que pueden tener una alteración de sus características, generando, en el tiempo, una enfermedad maligna. Habitualmente es una patología de crecimiento lento, y muchas tienen etapas previas displásicas o pre malignas.
Factores de riesgo
Infección por VPH. La infección por el virus del papiloma humano (VPH), que se transmite por el contacto sexual, es la causa principal del cáncer de cuello uterino. Hay más de 80 tipos de virus del papiloma humano, de los que casi 30 tipos pueden infectar el cuello uterino. Los tipos 16 y 18 de VPH son los que se relacionan con mayor frecuencia con este tipo de cáncer.
La mayoría de las veces, el propio sistema inmunológico puede combatir la infección por el VPH antes de que se forme el cáncer. Solo un número muy pequeño de mujeres infectadas con este virus presentan cáncer de cuello uterino.
Múltiples parejas sexuales y el comienzo temprano de la actividad sexual. Dado que aumenta el riesgo de contagiarse VPH.
Multiparidad. Más de 7 embarazos triplican el riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino.
Anticonceptivos orales. La toma prolongada (+10 años).
Tabaquismo. Fumar y la combinación con la infección por VPH aumenta el riesgo de desarrollar patología maligna 2 a 3 veces en relación con la población general.
Dietilestilbestrol. Una medicación que se usó hasta el año 1975 aumentaba el riesgo de desarrollar cáncer de cuello de útero y de vagina.
Factores de prevención
Abstinencia sexual.
Vacuna contra el VPH. La vacunación previene la infección por las cepas más frecuentes que producen lesiones malignas. La eficiencia es mayor al 90%. No previene la enfermedad en mujeres que ya están infectadas.
Utilización de método de protección de barrera durante la actividad sexual. Disminuye el riesgo de contagio de VPH.
Evitar el tabaco.
Alimentación saludable y actividad física regular. Mejora el estado de salud y del sistema inmunológico.
Método de detección
La toma de muestra de Papanicolaou ha demostrado ser efectiva para reducir el número de casos nuevos de cáncer de cuello uterino. Este es un estudio que se realiza con frecuencia anual en consultorio, a partir de los 21 años o a partir de tener actividad sexual regular durante un año. Por supuesto, su médico de cabecera podrá indicarle algo diferente según su caso particular.
Además, su médico podría indicarle un test de captación de VPH para determinar la presencia de virus.
El control ginecológico anual y el asesoramiento con un profesional especializado puede prevenir esta patología de manera significativa.
Dra. Andrea Marazzi – Médica Ginecóloga – MN 82496 -Staff Planearte